Ahora que se acercan los meses de verano, es posible que esté planeando pasar tiempo al aire libre con la familia y los amigos. Pero antes de salir al sol, hay que tomar precauciones para proteger la piel.
El peligro más inmediato de pasar tiempo al sol son las quemaduras solares. Sin embargo, la exposición al sol también puede aumentar el riesgo de cáncer de piel, que, según la Academia Americana de Dermatología, es el tipo de cáncer más frecuente en Estados Unidos. De hecho, uno de cada cinco estadounidenses desarrollará cáncer de piel a lo largo de su vida, y cada hora muere una persona por melanoma, la forma más mortal de cáncer de piel.
Con motivo del Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Piel, hemos hablado con el Dr. Henry W. Lim, dermatólogo colegiado, presidente emérito del Departamento de Dermatología del Hospital Henry Ford de Detroit (Michigan) y ex presidente de la Academia Americana de Dermatología (AAD), sobre lo que pueden hacer los consumidores para prevenir los daños cutáneos y el cáncer de piel, y protegerse del sol.
Guía de seguridad solar para expertos
Guía de seguridad solar para expertos
Guía de seguridad solar para expertos

Ahora que se acercan los meses de verano, es posible que esté planeando pasar tiempo al aire libre con la familia y los amigos. Pero antes de salir al sol, hay que tomar precauciones para proteger la piel.
El peligro más inmediato de pasar tiempo al sol son las quemaduras solares. Sin embargo, la exposición al sol también puede aumentar el riesgo de cáncer de piel, que, según la Academia Americana de Dermatología, es el tipo de cáncer más frecuente en Estados Unidos. De hecho, uno de cada cinco estadounidenses desarrollará cáncer de piel a lo largo de su vida, y cada hora muere una persona por melanoma, la forma más mortal de cáncer de piel.
Con motivo del Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Piel, hemos hablado con el Dr. Henry W. Lim, dermatólogo colegiado, presidente emérito del Departamento de Dermatología del Hospital Henry Ford de Detroit (Michigan) y ex presidente de la Academia Americana de Dermatología (AAD), sobre lo que pueden hacer los consumidores para prevenir los daños cutáneos y el cáncer de piel, y protegerse del sol.
¿Cuáles son los peligros de exponerse demasiado al sol?
Aunque las actividades al aire libre tienen muchos beneficios, estar al aire libre nos expone al sol, por lo que es importante conocer los riesgos. La luz solar incluye rayos ultravioleta (UV) invisibles. Cuando estos rayos llegan a la piel, reaccionan con el ADN provocando quemaduras solares y daños en la piel, y con una sustancia química llamada melanina que da lugar al bronceado. Sí, el bronceado es un signo de daño cutáneo. El riesgo de daño aumenta con la cantidad (por ejemplo, cuánto tiempo) y la intensidad de la exposición (por ejemplo, la hora del día) al sol. Las personas de cualquier color de piel corren el riesgo de sufrir daños solares, y los rayos del sol pueden causar daños incluso en días frescos y nublados.
Hay dos tipos de rayos UV que debe conocer:
- Los rayos UVA atraviesan fácilmente la capa de ozono de la Tierra, por lo que son la forma más común de exposición al sol. Los rayos UVA hacen que nuestra piel envejezca y se arrugue, además de contribuir al cáncer de piel.
- Los rayos UV B suponen una menor exposición al sol que los UVA, pero son más intensos. Los rayos UVB provocan quemaduras solares, cataratas (opacidad del cristalino del ojo) y afectan a nuestro sistema inmunitario. Estos tipos de rayos también contribuyen al cáncer de piel.
Les digo a mis pacientes que sigan unas cuantas reglas básicas a la hora de mantener la piel sana y protegida de la exposición al sol:
- Busca la sombra. Recuerda que los rayos del sol son más intensos entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde. Una buena regla es que si tu sombra es más corta que tú, es hora de buscar la sombra.
- Cúbrase. Lleve ropa protectora, como una camisa ligera de manga larga, pantalones, un sombrero de ala ancha y gafas de sol, siempre que sea posible. Esta regla debe aplicarse siempre a bebés y niños, que son más sensibles al sol.
- Utilice un protector solar. Aplique generosamente un protector solar de amplio espectro, resistente al agua, con un factor de protección solar (FPS) de 30 o superior. Los protectores solares de amplio espectro protegen de los rayos UVA y UVB. Asegúrese de aplicarse el protector solar al menos 30 minutos antes de salir al exterior y vuelva a aplicárselo cada dos horas, o después de nadar o sudar.
- No utilice nunca cámaras bronceadoras. Las camas bronceadoras y las lámparas solares contienen grandes cantidades de rayos UV; se sabe que aumentan el desarrollo del cáncer de piel.
En septiembre de 2021, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) publicó una propuesta de orden que actualizaría los requisitos reglamentarios de los productos de protección solar más comunes que se venden en Estados Unidos. ¿Qué significa esto para el público?
En la orden propuesta por la FDA se pedía a los fabricantes de protectores solares que facilitaran más datos sobre la seguridad de varios ingredientes de los protectores solares, que llevan años utilizándose en Estados Unidos. En concreto, la FDA quiere averiguar hasta qué punto nuestra piel absorbe determinados ingredientes de los protectores solares y si la absorción de estos ingredientes tiene efectos sobre nuestra piel y nuestro organismo.
En su propuesta de orden, la FDA clasifica dos ingredientes de los protectores solares como "generalmente reconocidos como seguros y eficaces" (GRASE): el dióxido de titanio y el óxido de zinc. La FDA también propone que otros dos ingredientes de los protectores solares no sean GRASE: el PABA y el salicilato de trolamina. Pero no se preocupe. No encontrará ninguno de estos ingredientes en los protectores solares que se venden legalmente en Estados Unidos. La FDA también pidió más datos de seguridad sobre 12 ingredientes antes de emitir una determinación final sobre su clasificación:
- Ingredientes utilizados habitualmente en Estados Unidos: ensulizol, octisalato, homosalato, octocrileno, octinoxato, oxibenzona, avobenzona.
- Ingredientes de uso poco frecuente en Estados Unidos: cinoxato, dioxibenzona, meradimato, padimato O, sulisobenzona.
Aunque la FDA está pidiendo más datos sobre estos 12 ingredientes, es importante señalar que no ha dicho que estos ingredientes no sean seguros. Además, la FDA confirma la eficacia de la protección solar como una de las formas importantes de proteger la piel del sol. De hecho, la FDA recomienda al público que siga las directrices de seguridad solar, como buscar la sombra, llevar ropa, sombreros y gafas de sol, y utilizar un protector solar de amplio espectro con un FPS de 30 o superior.
¿Cómo sé si utilizo el protector solar adecuado?
Hay una gran variedad de protectores solares con distintos ingredientes y niveles de protección a disposición de los consumidores. Pero para proteger tu piel de los rayos nocivos del sol, asegúrate de usar siempre un protector solar que ofrezca lo siguiente:
- FPS 30 (o superior)
- Protección de amplio espectro (UVA/UVB)
- Resistente al agua (si es necesario)
Asegúrese de buscar un protector solar que le proporcione estos tres beneficios. Es posible que en algunos productos aparezcan las palabras "amplio espectro" o "UVA/UVB". Los estudios demuestran que su uso diario puede reducir el riesgo de cáncer de piel y los signos de envejecimiento prematuro, como las arrugas y las manchas de la edad.
¿Qué deben tener en cuenta los padres al aplicar protector solar a los niños pequeños?
Todas las personas mayores de seis meses deben utilizar protección solar. En el caso de los bebés y niños pequeños, lo mejor es utilizar un protector solar que contenga óxido de zinc o dióxido de titanio, ya que es el más adecuado para la piel sensible. Por supuesto, aunque se utilice protector solar, hay que mantener a los niños a la sombra y con ropa que proteja del sol en la medida de lo posible.
A los niños menores de seis meses hay que evitar aplicarles crema solar. Protéjalos del sol poniéndolos a la sombra y vistiéndolos con camisas de manga larga, pantalones, sombreros de ala ancha y gafas de sol. Eso sí, tenga cuidado para evitar el sobrecalentamiento.