Salud cardiaca y medicamentos de venta libre
Salud cardiaca y medicamentos de venta libre
Si padece hipertensión, no está solo: Uno de cada tres adultos en Estados Unidos padece hipertensión, un problema de salud que aumenta el riesgo de cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
Si su médico le diagnostica hipertensión arterial, tendrá que hacer varios cambios en su rutina diaria, como vigilar lo que come, modificar su rutina de ejercicio y tomar los medicamentos que le hayan recetado. Pero también tendrás que tener cuidado con los medicamentos de venta libre que tomes. Aunque la mayoría de los medicamentos de venta libre son seguros, algunos pueden aumentar la tensión arterial o provocar reacciones adversas cuando se combinan con medicamentos prescritos para la tensión arterial.
Recuerde que siempre es importante leer atentamente las etiquetas de los medicamentos de venta libre, y esto es aún más importante cuando se padece hipertensión. Si tu tensión arterial es superior a 120/80 mm Hg o si estás tomando medicación con receta para la tensión arterial, habla con tu médico antes de tomar cualquier medicamento o suplemento de venta libre.
Las personas con hipertensión controlada deben tener cuidado al utilizar cualquiera de los siguientes tipos de medicamentos de venta libre:
- Los AINE como el ibuprofeno y el naproxeno sódico pueden disminuir la función renal y hacer que el organismo retenga líquidos, lo que aumenta la presión arterial.
- Descongestionantes. Estos medicamentos para el resfriado común estrechan los vasos sanguíneos de la nariz y los senos paranasales, lo que ayuda a aliviar los síntomas al reducir la inflamación y drenar el exceso de líquido. Pero los descongestionantes pueden contribuir a elevar la tensión arterial al estrechar los vasos sanguíneos de otras partes del cuerpo. Además, si sus medicamentos para la alergia o el resfriado contienen pseudoefedrina o fenilefrina, consulte a su médico; ambos ingredientes pueden interferir con los medicamentos prescritos para la tensión arterial.
- Algunos medicamentos de venta sin receta tienen un alto contenido en sodio, que aumenta la tensión arterial al hacer que el cuerpo retenga agua. Busque en la etiqueta de ingredientes palabras como "sodio" o "sosa" e intente elegir alternativas con menor contenido en sal. Las personas con hipertensión deben ingerir menos de 1.500 mg de sal al día, y algunos medicamentos de venta libre pueden contener más de la cantidad diaria permitida.
Aspirina y salud cardiaca
Es posible que haya oído que tomar una aspirina al día puede ayudar a mantener alejado al médico, ya que previene el infarto de miocardio o el ictus. Sin embargo, muchas personas se sorprenden al saber que las instrucciones para tomar aspirina de forma preventiva se encuentran en la etiqueta de los medicamentos de venta libre. Antes de empezar a tomar aspirina a diario, asegúrese de hablar con su médico sobre los posibles beneficios y riesgos de tomar aspirina a diario y sobre si debería formar parte de su plan de tratamiento para la salud del corazón.
Salud cardiaca y medicamentos de venta libre
Salud cardiaca y medicamentos de venta libre
Salud cardiaca y medicamentos de venta libre

Si padece hipertensión, no está solo: Uno de cada tres adultos en Estados Unidos padece hipertensión, un problema de salud que aumenta el riesgo de cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
Si su médico le diagnostica hipertensión arterial, tendrá que hacer varios cambios en su rutina diaria, como vigilar lo que come, modificar su rutina de ejercicio y tomar los medicamentos que le hayan recetado. Pero también tendrás que tener cuidado con los medicamentos de venta libre que tomes. Aunque la mayoría de los medicamentos de venta libre son seguros, algunos pueden aumentar la tensión arterial o provocar reacciones adversas cuando se combinan con medicamentos prescritos para la tensión arterial.
Recuerde que siempre es importante leer atentamente las etiquetas de los medicamentos de venta libre, y esto es aún más importante cuando se padece hipertensión. Si tu tensión arterial es superior a 120/80 mm Hg o si estás tomando medicación con receta para la tensión arterial, habla con tu médico antes de tomar cualquier medicamento o suplemento de venta libre.
Las personas con hipertensión controlada deben tener cuidado al utilizar cualquiera de los siguientes tipos de medicamentos de venta libre:
- Los AINE como el ibuprofeno y el naproxeno sódico pueden disminuir la función renal y hacer que el organismo retenga líquidos, lo que aumenta la presión arterial.
- Descongestionantes. Estos medicamentos para el resfriado común estrechan los vasos sanguíneos de la nariz y los senos paranasales, lo que ayuda a aliviar los síntomas al reducir la inflamación y drenar el exceso de líquido. Pero los descongestionantes pueden contribuir a elevar la tensión arterial al estrechar los vasos sanguíneos de otras partes del cuerpo. Además, si sus medicamentos para la alergia o el resfriado contienen pseudoefedrina o fenilefrina, consulte a su médico; ambos ingredientes pueden interferir con los medicamentos prescritos para la tensión arterial.
- Algunos medicamentos de venta sin receta tienen un alto contenido en sodio, que aumenta la tensión arterial al hacer que el cuerpo retenga agua. Busque en la etiqueta de ingredientes palabras como "sodio" o "sosa" e intente elegir alternativas con menor contenido en sal. Las personas con hipertensión deben ingerir menos de 1.500 mg de sal al día, y algunos medicamentos de venta libre pueden contener más de la cantidad diaria permitida.
Aspirina y salud cardiaca
Es posible que haya oído que tomar una aspirina al día puede ayudar a mantener alejado al médico, ya que previene el infarto de miocardio o el ictus. Sin embargo, muchas personas se sorprenden al saber que las instrucciones para tomar aspirina de forma preventiva se encuentran en la etiqueta de los medicamentos de venta libre. Antes de empezar a tomar aspirina a diario, asegúrese de hablar con su médico sobre los posibles beneficios y riesgos de tomar aspirina a diario y sobre si debería formar parte de su plan de tratamiento para la salud del corazón.